El trágico suceso se produjo este lunes, cuando el barco se estrelló contra las rocas frente a la costa asturiana. Además del único superviviente, se rescataron los cadáveres del patrón del barco, Francisco Gomes Fragateiro, de nacionalidad portuguesa; y de Manuel Indalecio Mayo Brea, el cocinero del buque.
Siguen buscando al resto de la tripulación, compuestos por Manuel María Tajes, Lucas José Mayo, ambos de nacionalidad española; Víctor José Farinhas, portugués y Suherman y Wasito, de Indonesia. A ellas se suma el asturiano Marcos del Agua Chacón, alumno en prácticas de la Escuela Náutica de Gijón.
La dificultad para acceder al barco, según Salvamento Marítimo, es "máxima" ya que la embarcación se encuentra en "posición vertical", a 30 metros de profundidad y se mueve mucho debido a las corrientes marinas de la zona por la proximidad a las rocas. A esta dificultad se añade que el barco tenía los aparejos en el agua preparados para pescar lo que hace que sea muy peligroso para los buzos.
En estos momentos, a las 18.40 horas, los servicios de rescate formados por el buque gallego Guardamar Concepción Arenal, el helicóptero Helimer 203 de Salvamento, un embarcación de la Cruz Roja de Gijón y la Patrulla Río Nalón de la Guardia Civil rastrean la superficie en una radio de 10 millas.